El ser humano tiene ciertas necesidades básicas que tiene que cumplir para estar en armonía consigo mismo. Para algunos el ir al gimnasio es indispensable para su salud física y mental, para otros es quizá su juego semanal de domino. Para mi, una de las más importantes -aparte de la cocina por supuesto-  es la expresión artística.  Todos tenemos el deseo innato de crear, de dejar nuestra huella en algo y así comprobar que realmente estamos presentes en el mundo y tenemos algo importante que aportar. No importa si no te dedicas a aquello en donde te expresas, el punto es que lo logres y seas feliz.

Como saben, pintar es uno de mis pasatiempos favoritos. Es un tiempo que tomo solo para relajarme y crear lo que veo y siento. No es solo un escape de la rutina de cada día, sino que es una obligación de mi propio interior. Cuando llevo varios días sin pintar empiezo a sentir una presión física y mental que no se libera hasta que me siento y dejo fluir mi expresividad. Llevo muchos años pintando, y la calma y satisfacción con la que me deja después de terminar un proyecto es una parte integral de mi personalidad y mi vida.

Desde chico siempre me gustó el arte y la historia de vida del artista representada en cada una de sus obras. Absorbí toda esa información como esponja y comencé a dibujar y subsecuentemente pintar. Es increíble la capacidad que tenemos para expresarnos en los diferentes medios que existen; y debo decir que la lista es interminable. Uno puede expresarse a través de la música, la escultura, la danza, su vestimenta, la cocina, joyería, la arquitectura y hasta en el tejido. Alguna vez conocí a una artista que se expresa a través de las piezas de un piano que iban a destruir. Sin embargo, para ella cada pedazo de ese viejo piano era hermoso y no podía dejar que se tirara, así que lo desbarató y creó una línea de arte portable (joyería) para que cada persona que lo use le vuelva a dar vida a ese viejo piano.

Nunca es ni muy tarde ni muy temprano para descubrir nuestro medio de expresividad. Es una buena manera de pasar tiempo con nuestros hijos, pareja y amigos, de descubrir juntos cosas nuevas. Ayer la hija de un amigo aquí en la CDMX plantó un pequeño huerto con frijoles, jalapeños, ajos y papas después de ver un video en Facebook y toda la familia le ayudó. Ahora espera con ansias a ver esos retoños que en poco tiempo saldrán y ya diseñó como va a acomodar todo en el balcón de su departamento. Uno podría pensar que es la locura de la cuarentena, pero en realidad descubrió algo que le encanta y seguirá haciendo después de que pase esta nube negra por el mundo. 

Por esta razón recomiendo ampliamente que aprovechen bien este tiempo para encontrar aquello que les llena ese espacio dentro de su interior. Si no sabes cuál es tu pasión artística puedes empezar con dibujos o escribiendo lo que sientes y piensas. El mundo está lleno de inspiraciones y está en nuestras venas querer expresar esa belleza a través del medio que mejor se acomode a nuestra personalidad, solo falta descubrirlo.