Cuando hablamos de vino normalmente pensamos en Chile, España o Argentina. No fue hasta hace pocos años que nos dimos cuenta que México tiene una selección y región de vinos que vale la pena conocer. Empezó con un mercado relativamente pequeño y poco a poco ha ido aumentando su reconocimiento de forma nacional e internacional. Las famosas uvas llegaron al país para quedarse a través de los conquistadores y misioneros. Los primeros para disfrutar su comida y los segundos para poder dar los sacramentos de la manera correcta. Gracias a ellos, la cosecha y producción del vino se extendió por la república hasta lo que es hoy.

El vino mexicano cuenta con muchas ventajas, entre ellas el tipo de tierra del territorio, su cercanía al mar y, especialmente, que en este país no existe una ley, consejo regulador o denominación de origen que prohíba experimentar con distintas mezclas como en otros países; es por esto que contamos con vinos de diferentes precios y orígenes. Algunas de las regiones productoras más famosas de vino son Querétaro, Valle de Guadalupe, Guanajuato y Coahuila.

No cabe duda que en México tenemos algo muy especial dentro del mundo viticultural y fue en 2013 cuando Casa Madero gana el primer lugar en la prestigiosa competencia de Vinalies Internationales en Francia como el mejor vino blanco del mundo que por fin, a nivel mundial, nos dimos cuenta que México tenía mucho que aportar. En el 2019, México se colocó por primera vez dentro de los top 10 países con mayores etiquetas premiadas. Contamos con una gran variedad de uvas y las más producidas son: Cabernet Sauvignon, Syrah, Nebbiolo, Merlot, Zinfandel, Cabernet Franc, Chardonnay, Chenin Blanc y Sauvignon Blanc.

Algunas de las bodegas mexicanas más famosas son:

Monte Xanic, Valle de Guadalupe

Es la primera bodega boutique de México. Fue fundada por cinco socios con el objetivo de hacer el mejor vino del país. A pesar de los desafíos económicos y culturales, la bodega comenzó una revolución en la elaboración del vino mexicano. Se le atribuye el establecimiento del estado actual del Valle de Guadalupe para el vino, tanto en México como en el extranjero.

Casa Madero, Coahuila

La bodega más antigua del Nuevo Mundo fue fundada en los 1597 por Don Lorenzo García entre Torreón y Saltillo, tierras que le fueron otorgadas por el rey de España para el singular propósito de producir vino. Han ganado más de 500 premios desde entonces y producen alrededor de 200,000 cajas de vino al año.

Finca Sala Vivé, Querétaro

Oficialmente la casa Freixenet fue fundada en 1889, con sede en Sant Sadurní d’Anoia, Barcelona. Con los años fueron expandiendo su producción al resto del mundo y actualmente cuentan con 18 bodegas en siete países y tres continentes incluyendo a México. Es el principal productor de vinos espumosos a nivel mundial y sus uvas mexicanas son altamente reconocidas.