No sólo se trata de comer, sino también de leer acerca de comida y de prepararla; por eso te dejamos tres libros que vale la pena conocer, consultar y conservar.

A leer y cocinar.

Dicen que en la vida hay que hacer tres cosas: plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro. Para muchos éste último es el más difícil de lograr, sin embargo, para otros ya forma parte de los objetivos cumplidos gracias a su pasión por la gastronomía. Te dejamos tres opciones que debes tener en tu biblioteca, no sin antes aprovechar el conocimiento que llevan dentro.

El gran libro botanero

Alexandra y Chío, mejor conocidas como las Chilangas Hambrientas, empezaron su proyecto como hobbie sólo por su amor a la comida y poco a poco se convirtieron en expertas en comer y beber. Recientemente publicaron El gran libro botanero, que es una recopilación de sus 80 platillos favoritos.

Y no sólo son fotos, sino también las recetas que los chefs de los mejores restaurantes de la Ciudad de México les compartieron; además ellas recomiendan el momento perfecto para prepararlas y un poco de la historia de su creación. El libro está dividido según el grado de dificultad de cada plato, desde Por si se te quema el agua, hasta Podría entrar a un reality de cocina amateur. De esta forma lo que quieren es provocar que la gente se anime a meterse a la cocina.

The Soul of Baja

Este ejemplar plasma la historia del chef Javier Plascencia, desde su infancia y su trayectoria como cocinero, hasta los nuevos proyectos que tiene en Tijuana, Ensenada y el Valle de Guadalupe. The soul of Baja es un tributo a su tierra natal y un festejo por su 30 años de carrera profesional.

También incluye testimonios de familiares y amigos, por ejemplo, Don Camillo Magoni, Anthony Bourdain y el chef Antonio De Livier. Por supuesto tiene recetas, pero son coleccionables, stickers, hermosas imágenes y textos en español con su traducción al inglés.

Federico Rigoletti

El autor le puso su nombre al libro porque es la historia de su vida a través de los platillos, todo lo que aprendió, los lugares y las bases que lo convirtieron en cocinero. También es el creador de varios conceptos gastronómicos, los más importantes, Puntarena y Marentino.

El prólogo lo escribió Juan Villoro y en sus páginas tiene decenas de recetas, las cuales van De lo fresco a lo natural, hasta los postres, y una sección de básicos para las salsas, mayonesas y otras preparaciones secundarias, pero igual o más importantes que las principales. Sin duda, este libro es un gran tesoro.