Recetas e ideas para entrarle a la tendencia del lunes sin carne
¿Te quedas sin imaginación al querer adaptar los lunes sin carne y buscas recetas? Además de explicarte a fondo la tendencia, te inspiramos.
No todo lo que se dice acerca de los alimentos orgánicos es totalmente cierto, por eso te aclaramos algunos de los mitos más conocidos.
Los alimentos animales y vegetales que se crían, cultivan y procesan sin la utilización de productos químicos, fertilizantes o conservadores son considerados orgánicos. En los últimos años, su producción y consumo ha aumentado debido a la difusión de varias creencias o mitos. Aquí te aclaramos cinco de ellos.
Cierto. Aunque depende del tipo de granja, de la ubicación y de los cuidados. En realidad, no contaminan con productos artificiales y favorecen la conservación del medio ambiente, pero se debe poner atención en los métodos, en la región (no todos los productos sirven para la misma zona) y en el uso racional de cada elemento extra.
Cierto y falso. Definitivamente, los alimentos que no tienen productos químicos industriales son menos dañinos, además en algunos casos, pueden conservar mejor sus nutrientes que los no orgánicos. Sin embargo aún son limitados los estudios al respecto y no se ha comprobado que brinden más beneficios unos que otros.
Cierto. El sabor de los productos cuidados de manera natural es único, sin duda, mejor que el de aquellos de procedencia industrial. Aunque durante los procesos de conservación (secado, cristalización o ahumado, entre otros) las características se igualan.
Falso. En el caso de las frutas y verduras orgánicas tienen 30% menos probabilidad de incluir pesticidas, pero no estan libres de ellos; en especial porque, a veces, son insustituibles.
Cierto. El precio de los orgánicos es casi el doble, en comparación con los alimentos producidos de manera convencional. Esto se debe a que se apegan al comercio justo, donde se considera el costo real de la producción y el apoyo a los agrícultores.