Aunque muchos piensan que el famoso aderezo César tiene sus raíces en Italia, en realidad fue creado en México, más específicamente en Tijuana, por el chef italiano César Cardini durante los años 20. Lo interesante de esta historia es que el aderezo fue resultado de una necesidad: Cardini tuvo que improvisar con los ingredientes que tenía a mano durante un fin de semana muy ocupado.

La versión casera de este aderezo es increíblemente fácil de preparar y mucho más sabrosa que las que encuentras en las tiendas. Con unos pocos ingredientes frescos y de calidad, lograrás el toque perfecto para tus ensaladas.

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Los secretos para un aderezo César perfecto

1. La frescura es clave para un aderezo sabroso. Usa ajo recién picado, limones recién exprimidos, y queso parmesano rallado en el momento.
2. Las anchoas son el secreto para obtener ese sabor umami profundo típico del aderezo César. Opta por anchoas envasadas en aceite de buena calidad, y no dudes en ajustar la cantidad a tu gusto.
3. La base del aderezo César es una emulsión de yema de huevo y aceite. Asegúrate de añadir el aceite muy lentamente mientras bates constantemente para crear una emulsión estable y cremosa.
4. Un buen aderezo César es el equilibrio entre lo cremoso, lo ácido, lo salado y lo umami. Ajusta el jugo de limón, el queso parmesano, y las anchoas hasta encontrar el punto perfecto para tu paladar.
5. Aunque el aderezo César casero es más fresco y sabroso, no tiene conservantes, por lo que es mejor consumirlo dentro de uno o dos días después de prepararlo. Guarda siempre en refrigeración en un recipiente hermético.

La receta para hacerlo en casa

Ingredientes:

• 2-3 filetes de anchoas
• 1 diente de ajo
• 1 yema de huevo
• 1 cucharadita de mostaza de Dijon
• Jugo de 1/2 limón
• 1/2 taza de aceite de oliva
• 1/4 de taza de queso parmesano rallado
• Sal y pimienta al gusto

Procedimiento:

1. En un mortero, machaca las anchoas y el ajo hasta formar una pasta.
2. Añade la yema de huevo y la mostaza, mezcla bien.
3. Incorpora lentamente el jugo de limón y luego el aceite de oliva, sin dejar de batir para emulsionar la mezcla.
4. Añade el queso parmesano, sal y pimienta al gusto, mezcla hasta que esté todo bien incorporado.
5. Ajusta los sabores según sea necesario, añadiendo más limón, queso o condimentos a tu gusto.

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