Una baguette recién horneada, mantequilla –que debe ser muy buena– y esta receta de mermelada de frambuesa son la combinación perfecta con la que Marco Beteta recuerda a las mujeres de su familia. La abuela Camille, de origen francés, se pasaba las tardes recordando sus tierras al compás de una espátula de madera que, al girar desprendía aromas dulces y ácidos.

Cuando la confitura quedaba lista, había que esperar a que se enfriara y tomara textura, cosa que la madre de Marco también aprendió bien. El premio llegaba para los pequeños de la casa: untar en las tapas de pan el resultado y así llenar de color y buenas memorias el postre, la hora de la televisión o la merienda.

Es un procedimiento muy sencillo y es justamente en la sencillez donde radica el lujo. Lujo de recordar, de vivir, de volver a los amores maternos en una mordida crocante. Te compartimos la receta.

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Mermelada de frambuesa: una receta de familia

Ingredientes

• 1 kilo de frambuesas frescas
• 1 kilo de azúcar

Preparación:

1. En una cazuela, poner las frambuesas y el azúcar en fuego alto.
2. Con espátula o cuchara de madera, empezar a mover y mezclar las frambuesas con el azúcar. 
3. Bajar el fuego y seguir moviendo. Es importante buscar los lados de la cazuela para evitar que el azúcar se quede pegado sin contacto de líquido y se haga caramelo. 
4. A fuego medio, dejar cocer por 20 minutos (tiempo justo para tener una mermelada estructurada)
5. Cuando se levante bien el hervor y se empiece a ver una espuma, comenzar a mover de vez en cuando.
6. Si se ve que esta muy fuerte el fuego, se baja. Tiene que ser un hervor ligero.
7. Cuando pasen los 20 minutos, servir y refrigerar durante mínimo 3 horas.

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