Por su valor proteínico, aporte en minerales y vitaminas del complejo B, el pollo provee energía, protege al sistema nervioso, refuerza el inmunológico e interviene en la formación de glóbulos rojos. Es recomendable consumirlo sin piel pues, además de ser alta en grasa y colesterol, en ella se quedan adheridos pesticidas y hormonas.

Porciones: 4. Tiempo: 40 minutos.

Ingredientes:

• 1 pechuga de pollo cortada uniformemente en cubos.
• 1 taza de jugo de naranja.
• 1 taza de caldo de pollo.
• 1 cucharada de fécula de maíz.
• 1 cucharada de orégano.
• La ralladura de una naranja.
• 1 pizca de paprika.
• 1 pizca de pimienta recién molida.
• Sal en grano.

Elaboración:

En una cacerola calienta el caldo de pollo, agrega el jugo de naranja y deja reducir por cinco minutos. Hidrata la fécula en agua fría y agrega a la preparación anterior. Mezcla con un batidor de globo hasta espesar. Enfría.

Mezcla la pechuga con la salsa de naranja, sazona con orégano, ralladura de naranja, paprika, sal y pimienta. Marina durante un par de horas en el refrigerador.

Forma las brochetas y asa en una sartén hasta cocinar perfectamente.

Ideal para maridar con:

El pollo armoniza prácticamente con toda clase de vinos; para este caso, el Chardonnay blanco es una excelente combinación.

Cerveza clara o lager.